No dudo que a veces tiembla mi casa
con todo y las personas que nos hallamos dentro.

Me quedo quieto, frente al ordenador,
escucho que nada se oye, y entonces mi mano tiembla.
La sostengo, y la silla se mueve; detengo a la silla
y empieza a moverse el aire,
luego las paredes y al final, el monitor.

Ello ocurre durante la noche, cuando estoy solo
en mi cuarto y nadie sabe lo que estoy haciendo.
Pero también en el día, a veces, mi casa tiembla
con todo y las personas que nos hallamos dentro.

Hoy, me quedo quieto frente a la ventana,
oigo tantas cosas que no escucho a nadie,
entonces quisiera que todo temblara de súbito,
pero nada ocurre...
A veces -sólo a veces- tiembla mi casa.
No lo pongo en duda.

10/22/2004

Posted on 10/22/2004
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